Esas pequeñas cosas

¡Amooooooooooooooooor! ¿Y mi camisa azul ?
- Estará colgada. Mira a ver en el perchero.
- Ya he mirado y no está
- Pues estará para lavar. O colgada. Mira a ver en el tendedero, anda.
- Que no, amor, que no está tampoco.
- ¿Qué pasa, que tengo que ir yo a buscarlaaaaaaaaa?


Y es justo ahí, en ese momento, cuando me doy cuenta de que también yo, me parezco cada día más a mi madre…


-¿Que tal el día cariño?
- Bien, bastante curro pero bien. Me ducho, me cambio y salimos a tomar algo ¿te parece?
- ¡Ah, pues sí! A ver si me aireo un poco.
- ¡Oye amor! ¿Y tu, que tal el día?
- Como siempre, sin novedad en el frente. Aunque hoy la espalda me está dando guerrilla.
- Bueno, esta noche te hago un masajito ¿Vale?
- ¡Sí, sí, sí! Lo necesito.
- Pero a cambio tu me haces unas cosquis....
- ¡Jajaja! Ya sabía yo que el masaje tenía un precio. Anda loco , dame un beso.
-¿Sólo uno? ¡Jajajaaaaaaaaa!


Y justo ahí, en ese preciso instante, caigo en la cuenta de lo mucho que le quiero.