buenos días princesa

Emma se levantó esa mañana deprisa , como todas . Había vuelto a dormirse . Se puso sus vaqueros rotos desteñidos y la sudadera azul de pitufina para ir a clase , corrió hacia el baño , encendió la luz y se dispuso a peinarse , cuando de repente vió algo raro en el espejo , había alguien dentro ! Pero no podía ser ¿ Cómo podía haber alguien allí dentro ? era científicamente imposible . Emma se enjuagó los ojos creyendo que esa visión había sido producida por el somnolecimiento de las 7:45 de la mañana , pero para su sorpresa al volver a abrirlos todavía estaba allí . Se quedó callada , con cara de impresión y mirando fijamente al espejo . El reén era un chico , moreno , con ojos verdes y barba de tres días , físicamente no era impactante , pero tenía algo de electricidad , esa que a Emma tanto le gustaba . Tímidamente dirigió su dedo índice a la fría superficie , pero no sucedió nada , su huesudo dedito no traspasó el vidrio .  El chico  permanecía perplejo desde el otro lado admirado por la casual belleza de la joven recién levantada , con el pelo enmarañado y oliendo a cama . Él sonrió , llevó su dedo hacia el espejo y dibujó un corazón .